La Historia En Tiempos De Cristo
Mar 13, 2021
En los siguientes siete días quiero llevarte a una velocidad supersónica a través de los eventos más importantes de la vida de Cristo. Es importante entender lo que estaba pasando en el mundo cuando Cristo nació. Así que hoy aprenderemos algo de historia y del significado de los sucesos más importantes de la vida de Cristo en la tierra.
Por motivos de la rebelión de Israel, Dios no habló con Su pueblo por alrededor de 400 años. La última persona que escuchó un mensaje de Dios fue Zacarías. El periodo entre el Antiguo y el Nuevo testamentos es ese tiempo de silencio durante el cual no hubo profetas ni profecías y la gente simplemente vivió el día a día sin saber respecto de Dios. La gente vivía religiosamente, yendo al templo, ese era su encuentro tradicional con Dios. Cristo nació en tiempos de César Augusto. De hecho, Lucas 2:1 indica que el César inició el censo que llevó a José y María a ir a Belén, lugar donde nació Jesús. Pero el Imperio romano era muy grande, es por esto que Herodes, quien era descendiente de los edomitas, era el gobernador de Jerusalén. Después de la muerte de Herodes, el territorio que él gobernaba se dividió entre sus dos hijos. Herodes Arquelao gobernó Judea y Samaria, mientras que Herodes Antipas gobernó Galilea y Perea. Los demás territorios, como Siria, fueron gobernados por un hijo menor. El César, rey de Roma, le quitó el territorio a Arquelao y puso en su lugar a un aristócrata o procónsul con 3000 soldados. Este aristócrata romano era Poncio Pilato, quien, como los demás procónsules, no gobernaban directamente, sino que usaba a líderes locales para mantener la paz. En los tiempos de Cristo, en la ciudad de Jerusalén Poncio Pilato usó al sumo sacerdote, Caifás, para sus planes. Aunque el sumo sacerdote era el líder religioso en Jerusalén, también era un diplomático encargado de mantener el orden, cobrar impuestos y obedecer las órdenes de Poncio Pilato, quien a su vez obedecía a César. El procónsul no vivía en Jerusalén, pero viajaba durante las fiestas religiosas para asegurarse de que no hubiera revueltas.
Dado el miedo a que diferentes territorios en el Imperio romano se sublevaran, había soldados patrullando todo el tiempo. ¿Te imaginas un toque de queda donde los militares patrullan tu ciudad? Bueno, pues así era en la antigua Jerusalén, tierra de un sincretismo de personas y culturas. Había gente que tenía un oficio, como carpinteros, mercaderes, herreros, con sus herramientas y uniformes típicos de sus oficios. Estaban también los levitas y sacerdotes, con sus vestimentas ornamentadas y con libros bajo el brazo. Habitaban también gobernadores, con túnicas romanas y coronas especiales. Y también soldados, con lanzas, espadas y estandartes, listos para poner orden. Bajo estas circunstancias todos convivían cordialmente, sin mezclarse demasiado entre ellos. Vivían en Israel, no como exiliados, pero sí bajo el gobierno romano, y aunque no eran esclavos, estaban bajo el yugo de Roma.
Si creías que los israelitas vivían en armonía los unos con los otros, esto no era así. Dentro de las elites religiosas había tres grupos que se oponían entre sí. Estaban los escenios, quienes querían separarse de las impurezas del mundo y crearon comunas en las cuevas de Qumrán. Eran un tipo monjes que vivían separados totalmente del mundo. Estaban también los zelotas, que eran los guerrilleros que buscaba derrotar a los romanos en una revolución violenta. Aunque no eran muy religiosos, tenían como pretexto la religión en su búsqueda de independencia. Estaban además los saduceos, quienes no creían en la resurrección y odiaban el legalismo de los fariseos, pero también buscaban poder, por lo que eran influyentes en la sociedad. Y finalmente estaban los fariseos, que eran los sacerdotes por excelencia y quienes imponían un nivel de religiosidad y de legalismo tan estricto que hacía que se les percibiera como más santos que las demás personas de aquella sociedad. Estas facciones se peleaban a cada rato y esto creaba tensión en Roma, por lo que Jerusalén era constantemente monitoreado por soldados romanos con el propósito de imponer una paz falsa de la cual Roma tanto se jactaba.
Sin embargo, no todo era malo en aquellos ayeres. Esa paz romana impuesta por todo el Imperio hizo que muchas industrias surgieran. Debido a que los romanos tenían poca tolerancia a las insurrecciones, la gente podía viajar con relativa seguridad. De hecho, a Roma le interesaba mucho el éxito económico, por lo que habían construido una considerable red de carreteras. Esto permitió no solo el comercio, sino que puso el escenario ideal para el esparcimiento del evangelio a través de lo que hoy es Europa, Asia y África.
Así fue el momento histórico en el que Cristo nació, creció y murió; saberlo ayuda a entender el maremágnum de motivaciones negativas que Dios usó para abrir el camino hacia la cruz donde Cristo dio su vida por nosotros.
APRENDE
- ¿Qué Imperio gobernaba en Jerusalén cuando nació Jesús? ¿Cuál era el rol del sacerdote judío en esa época? ¿Qué grupos religiosos se formaron durante ese tiempo? ¿Por qué Dios guardó silencio durante 400 años?
VIVE
- ¿Has pasado por algún tiempo en el que hayas sentido que Dios no te habla? En ocasiones, el Señor permanece en silencio, pero eso no significa que Su poder no siga actuando sobre ti.
LIDERA
- Como puedes ver, Dios es soberano sobre el tiempo y las circunstancias. Recuérdale a un amigo o familiar que todo lo que sucede en la historia del mundo no está bajo el control de los políticos, sino de Dios.
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