Maternidad en un mundo caído
May 03, 2021
Mayo es el mes de las madres. Durante este mes celebramos y honramos la maternidad, sin embargo, tú y yo sabemos que no todo es tan lindo como parece; que ser madre implica dificultades y dolor. Si echamos un vistazo a la historia, veremos que el mundo perfecto, bondadoso y bueno que Dios creó dejó de ser así cuando el ser humano pecó por primera vez (Gn 3). Desde entonces, nada es lo mismo. De alguna u otra manera, tú y yo vivimos la maternidad de un mundo caído; de un mundo lleno de pecado. Lo sabes porque tu sueño es ser madre, pero no puedes embarazarte, o porque tu hijo murió. Tal vez lo sabes porque fuiste madre y abortaste, o porque tienes un hijo con alguna discapacidad; o por el simple hecho de ser hija o mamá.
En Reformadas queremos hablar de la realidad de la maternidad que te afecta, que me afecta, ¡pero que nos une y nos acerca a Jesús! Queremos hablar con esperanza, porque, a pesar del dolor que has experimentado, Cristo puede traer redención a tu vida.
¡Únete a esta nueva travesía! Durante las siguientes semanas estaremos compartiendo historias de mujeres que han experimentado algunas de las facetas más difíciles de la maternidad: rechazo, pérdidas, adopción, infertilidad y muchas otras más. ¡Ellas se han levantado porque han encontrado esperanza en Cristo! ¡Y tú también puedes hacerlo!
Donde sea que te encuentres, quiero que sepas que Dios te ve; Cristo te escucha. Dios conoce las lágrimas que corren en secreto en la oscuridad de la noche. Él quiere llevarte del jardín del Edén, donde todo era perfecto y dejó de serlo a causa del pecado, a un jardín que se encuentra en el centro de la Biblia: el jardín de Getsemaní, en donde encontramos a Cristo en la cruz entendiendo el costo de la redención de tu maternidad. La cruz en la que Jesús entregó su vida abre un camino hacia un nuevo jardín en la nueva Jerusalén en donde Dios quitará toda lágrima de tus ojos y no habrá más llanto, ni muerte ni dolor (Ap 21:4).
¡Acompáñanos! Será un recorrido difícil en el que tocaremos cicatrices profundas que atravesamos en la maternidad, ¡pero encontraremos esperanza en Cristo!
¡Únete Reformadas hoy!
Y accede a los estudios Bíblicos gratuitos que satisfacen tu alma y aumentan tu fe.
