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Bautismo

Mar 15, 2021

Un día, Jesús fue de Galilea al Jordán para que Juan lo bautizara. Pero Juan trató de disuadirlo. —Yo soy el que necesita ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí? — objetó. —Hagámoslo como te digo, pues nos conviene cumplir con lo que es justo —le contestó Jesús. Entonces Juan consintió. Tan pronto como Jesús fue bautizado, subió del agua. En ese momento se abrió el cielo, y él vio al Espíritu de Dios bajar como una paloma y posarse sobre él. Y una voz del cielo decía: «Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él». Mateo 3:14-17

 

Resulta muy interesante saber que Cristo fue bautizado también. Más allá del concepto que tengamos del bautismo por haber sido bautizados desde niños, estudiemos las implicaciones bíblicas del bautismo de Cristo.

Ante la duda de Juan el Bautista, Cristo responde con una palabra muy importante: justo. Esto se refiere al sometimiento en obediencia a Dios el Padre. El hecho de que Cristo se sometiera a ese bautismo de arrepentimiento (aunque no tenía pecado) muestra la obediencia con la que Cristo vivió Su vida en la tierra. Pero, de acuerdo con mi profesor Jonathan Pennington, el bautismo de Cristo también tiene un sentido más profundo. Cristo comienza Su ministerio después de Su bautismo diciendo: Arrepiéntanse (Mateo 3:2), esto es una invitación a regresar a Dios, pero no de dientes para afuera, sino con un cambio de corazón que lleva a un cambio de hábitos y pensamientos y acciones. Es una invitación a seguir Su camino, después de que Cristo había dedicado Su vida en este mundo al Padre.

Cristo te hace una invitación bien difícil. El ser cristiano nunca ha sido popular, y mucho menos en nuestros días en donde la verdad puede ser lo que se nos dé la gana, en donde el seguir tu corazón es el lema y en donde el ser humano es el centro del universo. Pero este es un mundo caído, son tiempos similares a los que Cristo vivió, por eso, Él hoy extiende esa misma invitación: arrepiéntete y síguelo sin importar el costo, ¡porque la ganancia será sublime y eterna!

El bautismo bíblico es en realidad una proclamación externa de una realidad interna. De manera pública es una muestra de que se ha decidido dedicar la vida a seguir a Cristo en obediencia y sumisión al Padre, a pesar del costo, junto a millones de personas que han decidido también tomar ese camino. El bautismo es un cambio de corazón que Cristo da a través de Su Espíritu. Es la proclamación externa del milagro interno que se ha experimentado en Él.

 

APRENDE

  • ¿Qué es el bautismo?
  • ¿Por qué Jesús se bautizó si era un bautismo de arrepentimiento y Él nunca cometió pecado?

VIVE

  • Si has creído y aceptado a Jesús como tu Señor y Salvador, te invito a tomar el siguiente paso de obediencia y ejemplo de Cristo descrito en Mateo 3:13-17: ser bautizado.

LIDERA

  • Invita a tus amigos y familiares a presenciar el bautismo de un creyente. Explícales que el bautismo es la expresión de que ha habido un cambio en nuestro corazón a través de Cristo.

 

 

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